Desarrollo basado en la comunidad
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Aprovechar el poder de la comunidad
El 19 de marzo de 2021, sin haber consultado a los residentes de Kensington, SEPTA anunció el cierre “hasta próximo aviso” de la estación Somerset El debido a condiciones de trabajo inseguras y al deterioro del sitio por la presencia de agujas y desechos de origen humano.
La parada El es una parte fundamental del transporte de Kensington y Port Richmond. En solidaridad con los trabajadores de SEPTA, los residentes, grupos civiles, comunidades religiosas, organizaciones sin fines de lucro y miembros del consejo se organizaron para exigir “seguridad y soluciones”. Reclamaron soluciones que abordaran las dificultades subyacentes de la estación, para que esta pudiera permanecer en funcionamiento y sus problemas no fueran relegados a los vecindarios circundantes o a otras estaciones de SEPTA.
El 23 de marzo, más de 200 personas marcharon desde la estación clausurada de Somerset hasta la estación de Allegheny para alertar sobre los problemas de falta de viviendas, trastornos relacionados con el abuso de sustancias y pobreza, que ocasionaron el cierre de la estación. La marcha tuvo cobertura de Al Día News, Generocity, Metro Philadelphia, The Philadelphia Inquirer, Plan Philly y The Star, así como de CBS 3, NBC 10, NYW News Radio y Univision 65.
En dos semanas, la estación volvió a operar, a pesar de que había obras de reparación en curso.
El Dr. Bill McKinney, director ejecutivo de NKCDC dijo al respecto: “Fue un logro importante para la comunidad. Los residentes, los grupos cívicos y las organizaciones sin fines de lucro se pusieron de pie, todos juntos, y ganaron esta batalla. La estación pasó de un cierre ‘indefinido’ a uno de cuatro o cinco semanas y luego a uno de dos semanas. La variable más importante fue la cantidad de ruido que hizo la gente”.
Tras la expectativa de desempeñarse como trabajadores de la sanidad, organismos de cumplimiento de la ley, paramédicos y expertos en salud mental, con frecuencia no se incluye a los residentes de Kensington en las decisiones sobre su propio vecindario.
—Dr. Bill McKinney
Oír la voz de Kensington
Con el correr de las décadas, las decisiones que se han tomado para Kensington han sido exitosas en el ámbito político, económico y profesional para quienes las tomaron, pero no han significado mejoras duraderas en las vidas de los residentes de Kensington.
El Dr. Bill McKinney, director ejecutivo de NKCDC, es un apasionado defensor del desarrollo basado en la comunidad, no solo como un ideal al cual aspirar, sino como un enfoque práctico al hecho de buscar soluciones sostenibles para situaciones en las que otros enfoques han fracasado.
“Cuando se presentan respuestas a problemas complejos de manera colaborativa y las implementan las personas que más tienen en juego, se obtienen soluciones sostenibles a largo plazo”, escribió McKinney en The Philadelphia Inquirer en 2022.
5 ENSAYOS PARA AUMENTAR LA PARTICIPACIÓN DE LA COMUNIDAD
- 100 bullets fired Friday. 9 people shot Saturday. That’s two days in Kensington.
Philadelphia Inquirer, November 2022 - As city leaders try to improve Kensington, they too often leave out community members
Philadelphia Inquirer, May 2022 - Kensington can’t wait to end gun violence, we need action now
Billy Penn, February 2022 - History is repeating in Kensington. It doesn’t have to be this way
PlanPhilly, May 2021 - How Kensington became an island
PlanPhilly, March 2021 - 5 principles of community driven development—and how to actualize them
Generocity, January 2021
Cuando se presentan respuestas a problemas complejos de manera colaborativa y las implementan las personas que más tienen en juego, se obtienen soluciones sostenibles a largo plazo.
—Dr. Bill McKinney
Visualizar el desarrollo basado en la comunidad
Si se considera que la participación comunitaria es una escalera, con frecuencia se deja a los residentes de Kensington relegados a los peldaños inferiores. Si bien muchos programas estatales, fundaciones nacionales, e incluso organizaciones locales sin fines de lucro dicen estar trabajando en beneficio de la comunidad, con frecuencia no se consulta a Kensington en los programas de planificación, implementación o evaluación de su vecindario. Se espera que los miembros de la comunidad donen su tiempo, información y conexiones. No obstante, a cambio, no consiguen un lugar para dar su opinión sobre decisiones estratégicas, no reciben financiamiento ni acceden a otros recursos disponibles.
“Si los líderes pudiesen valorar y compartir el poder con los residentes de una manera significativa, podrían aprovechar no solo el vasto conocimiento de la comunidad, sino la pericia que ha acumulado la comunidad tras años de experiencia directa”, explica McKinney.
